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En Chile se producen 5 millones de toneladas de fruta

BARBAR aumenta el calibre y durofel de las Cerezas, al mismo tiempo que disminuye la aplicación de fertilizantes tradicionales.

Chile es el primer exportador frutícola del hemisferio sur y el mayor exportador del mundo de arándanos, cerezas, uvas de mesa y ciruelas.

 En la actualidad, a 30 años de sus inicios, el sector frutícola chileno está en pleno auge. Se producen en el país cerca de 5 millones de toneladas de fruta, de las cuales se exportan 2,6 millones como fruta fresca, por valor de más de 4.000 millones de USD al año. Por consiguiente, Chile es el primer exportador frutícola del hemisferio sur y el mayor exportador del mundo de arándanos, cerezas, uvas de mesa y ciruelas.

Actualmente las principales plantaciones en el país son las vides, los cerezos, los nogales y los aguacates. Es preciso mencionar que a pesar de que la uva ha sido tradicionalmente la principal exportación chilena, durante 2019, la cereza se convirtió en la principal fruta chilena enviada al exterior en términos de valor. Esto se debe principalmente a la falta de competencia en este mercado en el hemisferio sur y a los mayores rendimientos que ofrece a los agricultores, tanto en producción como en valor.

Estos productos frutícolas requieren un alto número de fertilizantes para su correcto desarrollo. Por ello, la mayor superficie plantada de frutales explica que la demanda de fertilizantes para este tipo de productos, tanto elaborados en el país como importados, esté en aumento.

Green Biotech Sur se dio a la tarea de validar resultados en terreno, de la aplicación de Biofertilizantes BARVAR en estas plantaciones, y el primer cultivo seleccionado fue la Cereza variedad Santina, específicamente en la zona de Comalle, comuna de Teno, VII Regíón.

El momento elegido para la aplicación de los Biofertilizantes fue exactamente cinco días después de la plena flor, a través de un sistema de riego por goteo, en un tipo de suelo arcilloso. Los resultados fueron excelentes, el cultivo con aplicación de Biofertilizantes logró disminuir la aplicación de fertilizantes tradicionales en un 100%, respecto de los cultivos testigos. Además, tanto el Calibre como el durofel de los frutos biofertilizados aumentó en promedio a tasas del 10%.

Los productores sacaron cuentas alegres ante la efectividad de BARVAR y ya están trabajando con el área técnica de la multinacional, para mejorar las técnicas de aplicación y seguir aumentando la calidad de sus frutos, lo que sin lugar a dudas permitirá mejorar precios en los mercados internacionales.