Mejoras Alfalfar con Green Biotech Sur

Aplicación de Biofertilizantes aumentan producción en un 34%

El potencial del alfalfar como unidad productiva debe involucrar a la tierra de cultivo y los efectos que cada temporada produce en ella.

Los Biofertilizantes de la línea BARVAR de la empresa Green Biotech han mostrado potentes resultados

La alfalfa es un cultivo fundamental para los sistemas lecheros intensivos de la zona central y también para aquellos que realizan conservación de forraje. Se estima que en Chile existen 60.000 ha de alfalfa, concentrándose el 70% de la superficie entre la Región de Valparaíso y la del Biobío. Aunque el principal factor considerado por los agricultores en la selección de una variedad de alfalfa es la producción, otros factores tales como la persistencia, calidad y nivel sanitario son también relevantes y convenientes de considerar al elegir la variedad a sembrar. 

 La producción, medida en toneladas de materia seca por hectárea (ton MS/ha) o su equivalente en fardos, ha aumentado a través de los años gracias al mejoramiento genético y selección de variedades más productivas. Esto significa haber pasado de una variedad top en 1998 con potencial de 18,4 ton MS/ha al año, a una variedad creada el 2006, capaz de producir 24,9 ton MS/ha al año. Dependiendo del peso del fardo, esto corresponde a aproximadamente 240 fardos más al año, lo que valorizado significa por lo menos $430.000 más por hectárea.

En Chile, se comercializan las variedades WL que presentan mayor productividad y resistencia a las plagas y enfermedades. No obstante, estos inmensos avances genéticos, el potencial del alfalfar como unidad productiva debe involucrar a la tierra de cultivo y los efectos que cada temporada produce en ella. En este ámbito los Biofertilizantes de la línea BARVAR de la empresa Green Biotech han mostrado potentes resultados en los cultivos de validación.

En Chile, los productores de Alfalfa de la VII Región, que han sido beneficiados con el programa de validación de los Biofertilizantes de Green Biotech, vieron como la altura de las plantas se incrementó un 6%, la cantidad de fardos por hectáreas fue un 34% más y el peso por fardo aumentó un 35%, todo lo anterior, respecto de cultivos con aplicación de fertilizantes tradicionales. Los investigadores de la multinacional siguen trabajando en terreno para medir los efectos benéficos en los suelos y las cosechas futuras, en un plan de largo plazo que la multinacional lleva a cabo entre Chile y Colombia y que pronto incorporará a Perú y Argentina.

Los auspiciosos resultados en suelos sudamericanos muestran que el camino es “Sanar la Tierra”, para recibir de ella